POWERED BY: KDTT
Frank Cuesta gana un premio Ondas. ~ Blog Insomnio
días online
entradas
comentarios

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Frank Cuesta gana un premio Ondas.

Si hablamos de un programa que se ha llevado un premio Ondas a la innovación de la televisión es el programa Frank de la Jungla. ¿Quién es Frank Cuesta?, lo descubrimos a continuación.


El leones Frank Cuesta,vive en Tailandia desde hace 11 años donde dirige Academia de Tenis en Bangkok pero los animales son su pasión.

Todo empezó cuando una vez afincado en Bankgok, Frank se marchó, como siempre, con su mochila y sus zapatillas de goma, solo, a la selva de Burma- la antigua Birmania- durante varios días ,"a ver animales desde cerca". Todo fue estupendo hasta que su "brújula interna" se bloqueó. Frank se perdió en la selva y tuvo que ser rescatado días después. Tras su experiencia estudió herpetología- la rama de la zoología que estudia reptiles y anfibios-, y se recorrió todos los Parques Nacionales de Tailandia. 

Cada vez que Frank escapaba a la selva llevaba una cámara doméstica y un pequeño trípode con él. Pasaba horas esperando a los animales y luego cuando los tenía de cerca, los enseñaba a la cámara. Un buen día, decidió visitar una cadena de televisión de Tailandia. "Mirad esto". Y dejó unas cintas. Al cabo de unos días tenía un programa de televisión en el prime time - horario de máxima audiencia- del país. Ver a un latino de casi 1,90, vestido de tenista y de blanco inmaculado -con gorra incluída- hablando tailandés y con una serpiente en la mano, era una bomba de relojería. 

En declaraciones a la web de Cuatro.com, Frank Cuesta ha confesado sentirse más feliz por sus compañeros que por él mismo. Frank, que asegura que no se desprenderá de su sempiterna gorra para recoger el premio, valora que su equipo ha innovado en Televisión "haciendo un programa diferente, un programa que es real".  

Una nueva especie ha sido descubierta recientemente en las selvas asiáticas. Un mamífero de 1.90 metros de altura, que se mueve sigiloso, cauto, en tríos. Es fácilmente identificable por su gorra blanca del revés, y sus crocs rojos con calcetines blancos. Recomiendan no acercarse por su naturaleza antisocial. Es de naturaleza poco sociable. Su nombre Francisco Cuesta, aunque se le conoce como Frank de la Jungla. Lo descubrieron por casualidad, en un 'Callejeros Viajeros'. Tres minutos fueron suficientes para 'cazarlo'. Rescató una cobra de una casa. Este domingo una víbora Russel le muerde y pone en peligro su vida 


Se trata de una especie de reciente descubrimiento y que aún está en estudio. De hecho, iba para tenista pero un accidente de moto a los 18 años cambió su destino. "Te suben a un despacho y te dicen: 'Hemos conocido a alguien que está como una cabra y mira lo que hace'", recuerda Santiago Trancho, el cámara de Frank de la Jungla. "Nunca pensamos que fuera tan inaguantable", lamenta Nacho Medina, director del programa. "Es un poco bipolar también", añade Trancho. Frank hace autocrítica: "Cierto, tengo cuatro, cinco personalidades diferentes. Soy muy antisociable. No tengo amigos. Es muy jodido para mí contactar con gente y que me aguanten o tener que aguantar sus tonterías. Si me dices una gilipollez te mando a tomar por culo y se acabó".


Es de naturaleza transparente. Enseña los animales tal cual son y él se muestra tal cual es. Frank, Trancho y Medina han convivido cuatro meses en las selvas para grabar esta segunda temporada. Y, claro, la convivencia es difícil. "Con Nacho tengo muchos problemas porque es muy recto y educado, como si fuera un padre. Lo típico que voy en contra. Santi es como una copia mía en pequeño, que quiere hacer todo lo que yo hago y me pone de mala ostia", describe Frank. Esta segunda temporada tiene mucho de convivencia, de su experiencia. Contra los que hablan de un guión premeditado, de que todo está preparado, Frank responde: "El rol de cada uno es lo que hacemos. Ni imposiciones ni leches. Si a mí me dicen que no puedo ir con la gorra les mando a tomar por culo".
"La diferencia de este programa con otros es que se ve cómo somos detrás de la cámara. Si soy patoso, torpe o feo, que lo soy, pues así salgo. Por ejemplo, Frank tiene problemas gaseosos y se tira pedos todo el rato, pues también salen. A Santi le sienta mal la comida y eructa, también sale. Frank se come un perrito caliente y vomita, sale. Es un programa de culto. Los programas de culto tienen sus ventajas, que son muy diferentes de los demás, y sus inconvenientes, que puede que no los vea ni Dios", desvela Medina.
 
Uno de los peores momentos de este trío lo vivieron cuando a Frank le muerde una víbora Russel, que puede verse en el primer capítulo de esta segunda temporada. En la primera, también pasó un mal trago cuando casi lo asfixia una pitón. Las críticas que aluden a montajes y apaños están ahí. Las respuestas también: "Me descojono cuando me dicen que está preparado. ¿Pero cómo coño vas a preparar algo 20 kilómetros dentro de la selva? No sabes lo que te va a pasar y eso crea tensión. Yo a veces me escapo y Nacho se cabrea", puntualiza Frank. "Imagínate, te vas con tu mejor amigo seis meses a la selva y acabas mal seguro", añade Trancho.

Pasan días en la selva. Llevan un teléfono satélite para una emergencia extrema. De momento, nunca lo han usado. Y han estado tentados más de una vez. Trancho se resbaló, se cayó y se le clavó un palo muy cerca del corazón. Pasaron horas y horas perdidos, sin encontrar la salida, lleno de sanguijuelas y con Medina enfermo. Tuvieron que subirse a un árbol ante una manada de elefantes... Yuyee, la mujer de Frank, famosa modelo en Tailandia, sería la encargada de activar el operativo de rescate.

 Dicen que sólo tienen una vida, pero Frank ha gastado ya tres. Ha estado dos veces en coma por picaduras de serpiente. La mordedura de la víbora Russel pudo ser letal. En Bangkok, un periódico abrió una apuesta para sus lectores que consistía en acertar el año en que moriría este leonés, debido a sus "locuras" con los animales salvajes. "El día que pase algo habrá que darles la razón". Los crocs rojos de Frank se encaminan de nuevo a la selva, su habitat natural. Se sienten extraños en el asfalto. Trancho y Medina van directos al bar. Sueñan con un pincho de tortilla y un buen filete de ternera.

 Frank de la Jungla: "En la tele o te mueres o nadie se cree nada"

Entrevista a Frank Cuesta realizada por "20  Minutos.es"

¿Cuáles son las novedades de esta temporada?
El programa no ha cambiado en cuanto al formato, somos las tres mismas personas, que viajamos por las selvas de Asia buscando animales y grabándolos. Lo que sí ha cambiado es que este año vamos a dedicar más tiempo a mostrar la convivencia durante los viajes, la trastienda. Hay muchos animales, mucha pelea y mucho cachondeo…

Desde luego no es un trabajo de oficina.
No, conlleva una preproducción de dos meses y luego cuatro meses grabando dentro de la selva. Es mucho trabajo porque pasamos periodos de hasta 20 días dentro de la selva, de la que salimos solo para ir a otra zona. Nos lo pasamos muy bien, pero es un trabajo bastante guarro.

Debe ser frustrante estar buscando un animal y que no aparezca…
Este año además buscábamos muchos animales, pero sólo encontrábamos a los que ya habíamos grabado el año pasado. Nos ha costado mucho esfuerzo, pero hemos conseguido imágenes de casi cien animales para ocho programas, lo que es muchísimo.

 ¿De dónde surgió ese amor suyo por los animales en general y los reptiles en particular?
Por los animales en general pues como a todos, cuando era niño me atraían mucho y es una pasión que no perdí. Lo de los reptiles comenzó como una cuestión de vaguería. Eran animales que no requerían demasiado trabajo para tenerlo como mascota. Yo era entrenador y jugador de tenis y viajaba mucho, por lo que me convenía tener animales así. Poco a poco fui aprendiendo más y hace 14 años, al llegar a Tailandia ya acabé de aficionarme.

Esto de trabajar con bichos no tiene mucho que ver con su profesión de tenista…
No, el mundo del tenis es un poco más pijo. El trabajo con los animales es más severo con la persona puesto que tienes que meterte en la selva o en el campo y tratar con animales que te pueden morder, porque se están defendiendo. A nivel personal, las dos cosas hacen un buen balance.

¿Han pasado miedo esta temporada?
Sí, ha habido momentos muy tensos. Por ejemplo, Santiago Trancho, el cámara, se llevó un castañazo y se le clavó una rama muy cerca del corazón. Yo he tenido varias mordidas, entre ellas una de víbora, que tuvimos que tratar en la propia selva porque no nos daba tiempo a llegar al hospital.

¿Y le guarda rencor a las serpientes que le muerden?
No. Si tú estás jorobando un poco a los animales para grabarlos ellos tienen derecho a defenderse. A veces dan ganas de decirle, “bien hecho tío”. Si juegas con fuego te puedes quemar.

En la primera temporada eran míticas las broncas que les echaba usted a sus compañeros…
En esta también pasa, solo que el cámara se rebela bastante contra mí. Como es más joven me ha ido perdiendo el respeto (risas). No son broncas de todo el rato, solo momentos puntuales en los que hay mucha tensión y el que lleva la voz de mando puede sobresalir. Pero también echan broncas Nacho Medina o Santiago. Son cuatro meses en la selva, es duro. Te vas con tu mujer dos semanas a la selva y acabas divorciado.

Tiene usted fama de borde.
Soy muy borde. Aunque en mi vida personal es diferente. Si estoy solo en la selva y cojo una cobra estoy más tranquilo, pero en televisión las cosas siempre son más extremas. Cada uno te ve de una manera, unos te ven simpático y otros como un gilipollas.

¿Qué le pareció la polémica que ponía en duda su accidente con la pitón?
Yo lo expliqué: eso es lo que pasó. Quedó ridículo porque en condiciones normales eso no te pasa. Yo me la había puesto en el cuello para poder ir hacia Santi y Nacho, pero me caí de culo y ahí fue donde me enganchó. Fue una situación ridícula, porque me metí en un lío sin necesidad. La gente tiene derecho a dudar. En la tele hoy en día o te mueres o nadie se cree nada.

¿Es verdad que se apuesta en Bangkok sobre el día en que morirá usted?
Ahora ya no. Esto fue hace unos años, cuando yo tenía un programa de televisión en Tailandia. Fue cosa de un periódico, pero al final se cansaron de hacer la gilipollez.

¿No se forró usted apostando a su favor?
No nos dejaron. Llamó mi mujer al periódico a apostar porque no me moría, pero no la dejaron.

¿Ha aprendido algo que no supiera rodando el programa?
Siempre aprendes de los animales, aunque sean animales que ya conocías. Además, siempre encontramos animales nuevos. Sin embargo de lo que más he aprendido es de televisión, de los tiempos, de cómo explicar las cosas un poco mejor, de manipular a los animales para que puedan salir bien en la tele.

En Cuatro hay otro gran aventurero, Jesús Calleja. Casualmente también es de León, como usted. ¿Qué tiene esa tierra que genera tantas ganas de aventura?
No te puedo decir… no me considero aventurero. Calleja sí, porque es como un Rambo en pequeñito. Yo solo soy un tío al que le gustan los animales y los busca por la selva. Ni subir montañas ni bucear. Yo cuando veo el peligro tiro para atrás, soy más bien cagueta.

Cuéntenos la historia de sus zuecos y sus calcetines blancos.
En Asia y Sudamérica, en la selva tropical hay muchas bacterias, sanguijuelas, garrapatas, ácaros… que se te van pegando en los pies, debajo de las uñas… Son zonas muy húmedas y te mojas mucho los pies. Después de probar muchos zapatos, la combinación de zuecos y calcetines es la mejor. Se secan más deprisa y no coges nada. Hace un año una persona atravesó la selva del Amazonas andando y lo hizo con unos zuecos como los míos.





La gran pregunta: ¿Es real todo esto?. No tengo la respuesta, lo que puedo decir es que es un programa entretenido, hace mucha gracia verlo caminar por la selva con sus zapatillas de goma rojas y ese carácter de desquiciado. Todos conocemos los programas de supervivencia de Bear Grylls (El último superviviente), el programa de Cody y Dave (Dúo de supervivientes), Myke y Ruth (Supervivencia en pareja)...pero me quedo con Frank de la Jungla, simplemente por ser divertido y diferente a todo lo demás que hemos visto de este tipo de programas reality .





MAS EN EL FORO

¿VOTAMOS EL POST?
¿QUIERES VER UNA ENTRADA AL AZAR? PUEDE QUE TE QUE GUSTE O PUEDE QUE NO.

2 comentarios :

  1. Soy un poco torpe y se me borrado lo que habia escrito... así que resumo, que para una vez que contacto con el mundo... Por que mi entorno esta rodeado de ovejas, 2 caballos, 2 perros (otro dos que tube ya no estan...) peces, alevines, ranas, gatos, canarios, culebras en la balsa piscina y yo...
    Bueno, en mi opinión, Frank es una persona increible, y muy maja, pero, yo ya sé lo que pasa cuando prefieres estar en medio de ´"ningún sitio importante" juando con el perro o de paseo por el monte. A la gente eso le parece raro, simplemente muy rara, pues yo dria que lo siento pero mentiria, soy antisocial, pero creo que más de lo que descibia Frank un vez en el programa, yo huyo de la gente, no me vale la pena cazarme los tacones para marchar a tomar algo una mañana Dominguera, cuando puedo largarme y olvidarme de la maldita humanidad llendó a montar a caballo a mis anchas, o bañandome en una balsita llena de bichetes, y "sapos y culebras" uf que asco!! ja. ja.
    Soy diferente, soy borde, soy rara, soy tal ...

    Me da igual, Franks es mejor persona que nadie que nadie que yo conozca, por supuesto que tendra sus fallos y que a veces se cabrea, o que vacila a su manera, que por lo visto con los conocidos bien, pero el resto no tanto, pero eso es algo que la gente que lo ven borde siempre repasaran una y otra vez. Y mil cosas más.

    Que pena de mundo, que como el más respetable es el que mejor coche tiene, a los demás que les den por... la cloaca de la ranita de San Antonio.

    ResponderEliminar
  2. -¡El comentario de no se cuantas lineas de arriba que tiene faltas de ortografía y me como las letras a punta pala, es mío.
    Perdón, por lo menos sé educación, :) es que no hay ganas de revisar el eso que he escrito, ya hago bastante poniendo acentos para lo vaga que soy,(no con todos los bichos que tengo) Da igual, me expreso de pena y soy más basta que un arao, pero así intentamos no ser los de campo... para ir a Madrid y que al hablar no te miren raro...

    ResponderEliminar

¡¡ Comentar no cuesta nada y suscribirse al Blog tampoco, es gratis !!

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Últimas entradas